domingo, 29 de mayo de 2011

BUEN HUMOR una web que nos ayuda


El arte de no enfermarse

Si no se quiere enfermar; hable de sus sentimientos. Las emociones y sentimientos que están escondidos y reprimidos, terminan en enfermedades como: gastritis, úlcera, dolores lumbares, dolor en la columna. Con el tiempo, la represión de los sentimientos degenera hasta el cáncer. Entonces, vamos a sincerar, confidenciar, compartir nuestra intimidad, nuestros secretos, y nuestros errores. El diálogo, el hablar, la palabra, es un poderoso remedio y una excelente terapia.
Si no se quiere enfermar; tome decisiones. La persona indecisa permanece en duda, en la ansiedad, en la angustia. La indecisión acumula problemas, preocupaciones, agresiones. La historia humana es hecha de decisiones. Para decidir es preciso saber renunciar, saber perder ventajas y valores para ganar otros. Las personas indecisas son víctimas de dolencias nerviosas, gástricas y problemas de la piel.
Si no se quiere enfermar; busque soluciones. Las personas negativas no consiguen soluciones y aumentan los problemas. Prefieren la lamentación, la murmuración, y el pesimismo. Es mejor encender un fósforo que lamentar la oscuridad. Una abeja es pequeña, pero produce lo más dulce que existe. Somos lo que pensamos. El pensamiento negativo genera energía negativa que se transforma en enfermedad.
Si no se quiere enfermar; no viva de apariencias. Quien esconde la realidad, finge, hace poses, quiere siempre dar la impresión de estar bien, quiere mostrarse perfecto, bonachón, etc., pero está acumulando toneladas de peso. Una estatua de bronce con pies de barro. Nada peor para la salud que vivir de apariencias y fachadas. Son personas con mucho barniz y poca raíz. Su destino es la farmacia, el hospital, y el dolor.
Si no se quiere enfermar; acéptese. El rechazo de sí mismo, la ausencia de autoestima, hace que nos volvamos ajenos de nosotros mismos. Ser uno mismo es el núcleo de una vida saludable. Quienes no se aceptan a sí mismos, son envidiosos, celosos, imitadores, competitivos, destructivos. Aceptarse, aceptar ser aceptado, aceptar las críticas, es sabiduría, buen sentido y terapia.
Si no se quiere enfermar; confíe. Quien no confía, no se comunica, no se abre, no se relaciona, no crea relaciones estables y profundas, no sabe hacer amistades verdaderas. Sin confianza, no hay relacionamiento. La desconfianza es falta de fe en sí, en los otros y en Dios.
Si no se quiere enfermar; no viva siempre triste. El bueno humor, la risa, el reposo, la alegría, recuperan la salud y traen larga vida. La persona alegre tiene el don de alegrar el ambiente donde vive. “El buen humor nos salva de las manos del doctor”. La alegría es salud y terapia.

Dr. Dráuzio Varella

2 comentarios:

Patricia N.M dijo...

No debemos dejarnos llevar por la tristeza, ni dejar que nuestros pensamientos nos atormenten por que un corazón alegre es la vida del ser humano y la alegría nos alarga la vida. Por eso no debemos hacer lo que nos gusta seno , que nos guste lo que hacemos , esto es una clara muestra de alegría en nuestro corazón y nos permitirá que los caminos sean más lindos por que “ la alegría es la piedra filosofal que todo lo convierte en oro”(B. Franklin ).
Patricia N.M.

Daiana Chiarella dijo...

Que tan cierto es esta publicación.
Aveces cuesta mucho, tomar decisiones por uno mismo y salir a enfrentar al mundo, pero si no lo hacemos o nos enfermamos o vivimos una vida al margen de todo.
Debemos dejar muestras de nuestro paso por ella, si no ¿Para qué vinimos a este mundo???...
Muy lindo Lourdes me encanto el blog