Estamos aquí desde el 5 de agosto de 2007, de cuando en cuando, para aportar color, esperanzas, posturas y renovadas ansias de mejorar, en lo personal y en lo profesional... ¡BIENVENIDOS!
martes, 30 de junio de 2009
lunes, 29 de junio de 2009
Para el aniversario de mi BASAVILBASO
Fundiste el hierro con tus manos
En la tierra de la aguas,
Fuiste herrero de las horas,
Compañero de lagunas y lomadas.
Madera tras madera en vagones,
Buscaste, carpintero, tu futuro.
Tu cielo no tenía nubarrones
Solo trabajo fuerte y seguro.
Pintores de arte cotidiana;
Puñeteros forjadores de Entre Ríos;
Albañiles de estaciones y esperanzas;
Artesanos de rieles en caminos.
Homenaje al recuerdo de tus pasos,
Reconocimiento merecido,
De un tiempo que paso, y poco quede,
De todo el esfuerzo ofrecido.
Sepan que quien da la recompensa
Es un Artesano Divino.
Sigan forjando sueños,
Sigan contándoles a sus hijos.
Las veces que volvieron tarde a casa
Por andar los rieles fríos.
Adelante solo quedan los galpones
Herrumbrados y vacíos.
Atrás el trabajo realizado
Y el deber cumplido.
El futuro puede ser el adelanto;
El presente, esta inactivo.
No se escucha el chirrido de los rieles
Ni en el yunque el golpe del martillo.
No se ven los colores verdes,
Los anaranjados, ni amarillos.
De aquellos vagones bien pintados
Que vimos cuando aun éramos niños.
Hoy el pasado los congrega en una fiesta:
Canto, danza, esperanza sin olvido.
Levántate, artesano de mí pueblo.
¡Festeje tu corazón palpitante, vivo!
Sofía de Lourdes Fernández
Marzo 1994
martes, 23 de junio de 2009
AL APROXIMARSE MI CUMPLE...
Hay algo que siempre recuerdo de mis primeros años de vida, los árboles de moras, que pocos quedan en mi barrio y el sonido de los trenes en la playa de la estación del ferrocarril.
Hoy les dejo esta hermosa canción y le hago un homenaje a ese árbol que me proporcionó el postre en las siestas y un lugar para jugar.
viernes, 5 de junio de 2009
Un poco de Arte
Veamos lo que nos cuenta sobre sí, Raúl Soldi y miremos las obras seleccionadas...
Yo, Raúl Soldi, cambié mi destino. Hijo de un cellista del Teatro Colón y sobrino de un luthier de Cremona, preferí la pintura a la música; pero no estoy arrepentido.
Nací en los fondos del Teatro Politeama, en un enorme caserón de tres patios, del cual no me voy a olvidar nunca. Todos los cuartos de la casa estaban alquilados a gente de teatro. Apenas se salía del zaguán, en la primera habitación se veía a una bailarina ensayando; en la antesala había una cantante; la casa entera era una caja de resonancias musicales y nadie podía quejarse de que su vecino molestara haciendo ruido.